Los procesadores presentados por Intel son una muestra más de que la empresa todavía conserva un absoluto liderazgo en el terreno de los ordenadores portátiles, a la espera de que AMD presente su esperado procesador basado en el Athlon pero adaptado a los requerimientos de este tipo de máquinas.
Los nuevos modelos de Pentium III elevan su velocidad de trabajo hasta los 1.000 MHz en el modelo tope de gama y hasta los 900 en el modelo inferior y conservan la tecnología SpeedStep de la que ya hemos hablado muchas veces que permite aumentar la duración de las baterías a costa de disminuir la frecuencia de trabajo y el voltaje, lo que evidentemente rebaja su potencia. Por ejemplo, en el modelo a 1 GHz y con la funcionalidad de ahorro de energía activada la frecuencia de trabajo baja hasta los 700 MHz y el voltaje también baja desde los 1,7 voltios hasta los 1,35 gracias a lo que el consumo desciende por debajo de los 2 watios.
Otras de sus características son: 28 millones de transistores y tecnología de fabricación de 0,18 micras. Bus del sistema a 100 MHz, 256 K de caché "full speed" y soporte para las extensiones multimedia SSE.
El otro modelo presentado fue el Celeron a 750 MHz, uno de los procesadores más equilibrados que se pueden encontrar en este terreno, con un coste de 170 $, mientras que los modelos de Pentium III cuestan 722 y 562 $ respectivamente, como siempre en cantidades a partir de las 1.000 unidades.
Para más información sobre distintos fabricantes que comercializan o lo harán en breve modelos basados en el Pentium III a 1 GHz consulte los siguientes enlaces: (en inglés)